Tras dos años y dos meses de prisión preventiva, el viernes 26 de abril, el Tribunal de Mayor Riesgo A absolvió al defensor q’eqchi’ Abelino Chub Caal. El tribunal concluyó que no había pruebas para ninguna de las acusaciones formuladas por el Ministerio Público (MP) y secundada por el querellante adhesivo, la empresa Inversiones Cobra S.A. En la sentencia se manifiesta que “se está haciendo uso del derecho penal como una forma para criminalizar la conducta del acusado” El tribunal ordenó la liberación inmediata del defensor y líder comunitario.
Tras escuchar la sentencia del tribunal, Abelino Chub Caal se dirigió a las y los asistentes de la audiencia declarando que “desde un principio cuando fui detenido, cuando fui a dar mi primera declaración, dije que quiero llegar al debate porque era importante para mi de desmantelar todas las injusticias que tiene de rodillas a las comunidades empobrecidas, oprimidas por el mismo Estado de Guatemala y se evidenció en este momento. Que el mundo sepa que no soy ningún criminal, no soy ningún delincuente.” Además hizo un llamamiento para la liberación de todas la personas defensoras de la tierra y el territorio criminalizadas y encarceladas.
Diversas organizaciones nacionales e internacionales han condenado la criminalización de Abelino Chub Caal, reclamando su libertad. Por ello, tras la resolución del tribunal, se dieron varios pronunciamientos a este respecto a través de twitter. Por su parte, el Procurador de Derechos Humanos (PDH) Jordán Rodas y el Relator Especial de Naciones Unidas sobre Defensoras y Defensores de Derechos Humanos, Michel Forst, celebraron la sentencia y su importancia por el reconocimiento que implica al derecho a defender derechos. Vicky Tauli, Relatora de las Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas, y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) llamaron a los Estados a no “utilizar el derecho penal para resolver casos de defensa de derechos de tierras, territorios y recursos naturales” y a “evitar el uso indebido del derecho penal para criminalizar a defensorxs de #DDHH”.
Abelino Chub Caal, profesor y promotor social de la Fundación Guillermo Toriello, fue capturado el 4 de febrero de 2017 en San Pedro Carcha, Alta Verapáz. Cuatro meses después fue ligado a proceso por el juez de primera instancia de Puerto Barrios (Izabal), Aníbal Arteaga, a pesar de que el MP en esta ocasión pidió la suspensión de la persecución penal por falta de pruebas.
El caso fue trasladado a la capital, y el 8 de mayo de 2018, el juzgado de Mayor Riesgo A presidido por la jueza Claudeth Domínguez decidió ligarle a proceso por los delitos de asociación ilícita, usurpación agravada e incendio. Estas acciones se refieren a hechos que según el MP ocurrieron en agosto y octubre del año 2016. El MP señaló a Abelino de haber organizado a la población para invadir la finca Plan Grande (El Estor, Izabal), así como de haber provocado fuego a una plantación de Palma Africana. También le señalaron de, dos meses después, haber liderado a la población para evitar el desalojo de la finca de forma violenta, provocando el enfrentamiento contra unos 1.500 oficiales de la Policía Nacional Civil.
La criminalización de Abelino Chub Caal se da en un contexto de aumento del uso del derecho penal contra las personas defensoras de la tierra y el territorio, particularmente en Alta Verapáz e Izabal.